A medida que la fábrica fue aumentando su producción, fue demandando más y más madera, madera local que con el tiempo fue menguando por la mala fama del Eucalipto en la zona, varias campañas de desprestigio y pocos incentivos a los propietarios de las fincas por parte de la administración frente a otros cultivos. Todo ello provocó la importación de nuestra materia prima. Pasó el tiempo y los costes de la madera de fuera, los avances en el cultivo del super-eucalipto y aprovechamiento del terreno, llevó a la empresa a elaborar un Plan Forestal para conseguir el abastecimiento local total.
Este plan parece cojonudo, ya que aparte de conseguir el 100% de madera local, reduce en un 29% la superficie de eucaliptales, gracias a la silvicultura (de 140.000ha pasaría a 100.000). No obstante la junta de Andalucía no tiene tanta prisa como la empresa en que esto se lleve acabo, y la presión ecologista de las zonas rurales y su difusión, no ayudan a acelerar el proceso.
3 años después de la presentación del plan, aún sigue parado por la Junta. El convenio consta de tres puntos clave:
La madera que se venía consumiendo los últimos años se repartía de este modo: 350.000m3 de Huelva (32%), 200.000m3 de Portugal (18%) y 550.000m3 de Uruguay (50%).
Al menos esto es lo que cuenta la empresa y así os lo trasladamos. Otra cosa es el negocio que puedan estar haciendo con la madera y los tejemanejes que están afectando a las tres fábricas del grupo. Parece que la producción de pasta de celulosa ya no es el principal objetivo de nuestros Directivos, que ven más rentable el trapicheo de madera. Cuestión que niega la empresa pero que a nosotros, ni a los compañeros de las otras dos factorías, nos sorprende en absoluto.
Este plan parece cojonudo, ya que aparte de conseguir el 100% de madera local, reduce en un 29% la superficie de eucaliptales, gracias a la silvicultura (de 140.000ha pasaría a 100.000). No obstante la junta de Andalucía no tiene tanta prisa como la empresa en que esto se lleve acabo, y la presión ecologista de las zonas rurales y su difusión, no ayudan a acelerar el proceso.
3 años después de la presentación del plan, aún sigue parado por la Junta. El convenio consta de tres puntos clave:
- La cesión de 410.00 m3 de madera abandonada (no cultivada) en montes públicos.
- Permutar 2.300ha de Ence en Berrocal por otros terrenos de la Junta.
- Concesión administrativa para renovar 6.000ha abandonadas de la Junta y los Ayuntamientos.
La madera que se venía consumiendo los últimos años se repartía de este modo: 350.000m3 de Huelva (32%), 200.000m3 de Portugal (18%) y 550.000m3 de Uruguay (50%).
Al menos esto es lo que cuenta la empresa y así os lo trasladamos. Otra cosa es el negocio que puedan estar haciendo con la madera y los tejemanejes que están afectando a las tres fábricas del grupo. Parece que la producción de pasta de celulosa ya no es el principal objetivo de nuestros Directivos, que ven más rentable el trapicheo de madera. Cuestión que niega la empresa pero que a nosotros, ni a los compañeros de las otras dos factorías, nos sorprende en absoluto.
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