El nuevo Servicio de Prevención.


Suponemos que toda la plantilla ya conoce al nuevo fichaje del Servicio de Prevención, el nuevo jefe, Francisco de la Cruz. Este hombre ha respondido con su criterio a una vieja demanda del Comité de Seguridad y Salud, que no era otra que la de sacar al Servicio de Prevención de sus despachos y comenzar a ver los tajos, aportar mejoras, parar trabajos que entrañan riesgos, analizar y valorar instalaciones peligrosas, procedimientos de riesgo, todo ello “in situ”, en el campo, educando a la gente en prevención e incluso pasó toda una noche en fábrica para valorar con sus propios ojos el problema del alumbrado. Este planteamiento de seguridad, en contra de lo que piensan muchos, no es un incordio, es una presencia real de la seguridad y supone un beneficio para todos ya que ganamos en prevención de riesgos y evitar posibles accidentes.
Estamos inmersos en una de las peores rachas de accidentes en mucho tiempo, nuestro trabajo debe y tiene que ser una actividad que no ocasiones daños a los que la desempeñamos. Ya conocemos el objetivo de cer0 accidentes y en esa línea hay que trabajar.
Cierto es que la seguridad ha estado un poco olvidada en los últimos tiempos, por eso hicimos una huelga (entre otras cosas), pero hoy la Dirección de fábrica y del Grupo dice estar en la línea de apostar fuerte por la seguridad, de darle la prioridad que se merece. A nosotros nos toca aportar, colaborar, comprometernos y concienciarnos, démosle a la empresa una nueva oportunidad de demostrarnos que las cosas están cambiando, que la seguridad es lo primero. Por ello no dudéis en consultar, asesoraros por el Servicio de Prevención, dar a conocer vuestras demandas, comunicar los incidentes que se producen y reclamar condiciones seguras.
Del mismo modo debemos actuar con cautela, mantenernos alerta ante los peligros que nos acechan. Muchos de los últimos accidentes son del tipo doméstico, es decir no relacionados con nuestra actividad industrial o productos que manejamos, como torceduras o golpes. Hay que extremar la prudencia, usar correctamente los EPIs y no olvidar nunca dónde estamos. Nuestros enemigos siguen siendo unas instalaciones viejas que no se diseñaron pensando en la seguridad de las personas, así como la confianza, las prisas y los malos hábitos.
No debemos olvidar el uso de los EPIs para cada situación, la empresa los tiene a nuestra disposición, “lo que haga falta”, es obligatorio el uso de casco y gafas de protección en todo el recinto industrial. Respecto a las instalaciones, la empresa se ha comprometido otra vez a ir eliminando los puntos de especial riesgo y dar solución a las maniobras y procedimientos peligrosos.
Ya sabemos que la seguridad empieza por uno mismo, debemos tomar nuestra parte de responsabilidad y cumplir con las normas, es nuestro pellejo el que está en juego.
Discutibles pueden ser las notas que nos manda el servicio de prevención, las ropas reflectantes de las contratas, el celo en el uso de EPIs en todos lados, etc, esperemos que éste sea sólo el comienzo y el nuevo Servicio de Prevención atienda a otras cuestiones primordiales como la regulación de las excesivas jornadas de los trabajadores propios y de las empresas externas, las condiciones ambientales de muchos puntos de la fábrica, el alumbrado, el orden y la limpieza, los canalillos, las maniobras, los accesos…
Hay que tirar abajo el número de accidentes, no dejando de ir al servicio médico sino no accidentándonos, una empresa con un alto índice de accidentabilidad es una empresa condenada a la extinción.

(borrador de la nota de los Delegados de Prevención a la Plantilla)



1 comentario:

Anónimo dijo...

aunque no viene a cuento alguien sabe si la pag de la nomina a cambiado o algo no entra